43 aniversario de la Revolución Islámica de Irán
Artículo del Sr. Embajador Ahmad Pabarja, Jefe de la Misión Diplomática de la República Islámica de Irán en Ecuador, con motivo del aniversario 43 de la Revolución Islámica de Irán
Quito-Ecuador 10 de febrero de 2022
El 11 de febrero se conmemora el 43 aniversario de la victoria de la Revolución Islámica de Irán. En esa fecha de 1979, la revolución del pueblo iraní triunfó bajo el sabio liderazgo del Ayatollah Khomeini. Un día como hoy los más de cien años de lucha de la nación iraní finalmente tuvieron su fruto y se cumplió el ansioso deseo del pueblo iraní de lograr la independencia, la libertad y el sistema republicano. La Revolución Islámica, a diferencia de otras revoluciones, triunfó no a través del conflicto armado, la violencia y la confrontación militar, sino por medios pacíficos y solo mediante marchas populares. El régimen monárquico imperante en Irán hasta entonces fue derrocado y nuestro país se liberó de un gobierno dictatorial, autoritario y completamente dependiente a poderes extranjeros, abriendo así un nuevo capítulo dorado en la historia antigua de Irán al presentar un nuevo modelo político al mundo. Un modelo derivado de los valores religiosos, basado en los principios de la democracia y el voto popular.
Sin embargo, el gobierno de los EEUU, desde los primeros días de la victoria de la Revolución Islámica, al ver amenazados sus intereses en la sensible región de Asia Occidental, trató de crear problemas, sabotajes y crisis para la nación persa. Para llevar a cabo sus propósitos, el gobierno de Estados Unidos tomó una serie de acciones contra la República Islámica de Irán, como su respaldo a intentos separatistas, el persuadir al entonces presidente iraquí Saddam Hussein de invadir Irán e imponer una guerra de ocho años al régimen iraní recién formado, así como bloquear la propiedad iraní en ese país, apoyar golpes de estado y a grupos terroristas, así como aplicar severas sanciones económicas.
Afortunadamente, con la resistencia y la estabilidad del gobierno y el pueblo de Irán, estas medidas no han podido detener a la República Islámica de Irán en su camino de crecimiento. Hoy en día, la República Islámica de Irán, luego de 43 años, sigue con más firmeza, con más motivación y con el gran respaldo popular, su camino hacia la justicia, igualdad y progreso, manteniendo siempre el espíritu de libertad y anti-tiranía. La República Islámica de Irán, durante estos años, ha superado las dificultades, limitaciones y sanciones mediante la resistencia, sabiduría, el discernimiento de las conveniencias y la dignidad de la nación, y, apoyándose únicamente en capacidades domésticas y utilizando el potencial científico de sus jóvenes, ha alcanzado grandes logros en ámbitos políticos, económicos, científicos y tecnológicos, convirtiéndose en uno de los países más estables e importantes en el Oriente Medio e incluso en el mundo entero.
Sin duda, uno de los aspectos más trascendentes de la Revolución Islámica ha sido los cambios en ámbito de las relaciones exteriores, que han conducido en la formación de una política soberana, dinámica, innovadora, construida en base a dos firmes e intocables columnas: la no injerencia en asuntos de otros países y no permitir injerencias en asuntos internos de nuestro país.
Nuestro país, a lo largo de las últimas cuatro décadas, siempre ha tratado de dar pasos positivos para la distensión y cooperación con otros países, en aras de eliminar las preocupaciones de la Comunidad Internacional, en algunos temas como es el caso de acceso a la energía nuclear.
Indudablemente, uno de los valiosos éxitos políticos de la República Islámica de Irán ha sido el Acuerdo Nuclear con los Países cinco más uno (5+1), como resultado de doce años de negociaciones constantes entre Irán y seis (6) potencias mundiales que fue firmado el 14 de julio del 2015, conocido como el Plan Integral de Acción Conjunta.
Este acuerdo fue un gran logro y victoria histórica tanto para Irán, como para los países cinco más uno (5+1) y el mundo entero, ya que prevaleció el diálogo y la diplomacia frente a la lógica bélica y de violencia. Además, resultó en la frustración de la Irano-Fobia, emprendido por algunas potencias mundiales, demostrando al mundo la verdad del pueblo iraní. Con este acuerdo, los doce años de resistencia del pueblo iraní frente a las presiones, amenazas y sanciones, tuvo un resultado favorable y al fin las Naciones Unidas y las seis potencias del mundo reconocieron el derecho de nuestra nación a la tecnología nuclear con fines pacíficos.
Pese a ello, el expresidente de EEUU se retiró del acuerdo en 2018, revelando de esa manera al mundo la naturaleza del gobierno de los EEUU, en flagrante violación de los acuerdos internacionales.
Para destruir el acuerdo nuclear, el régimen de Trump recurrió al terrorismo económico contra Irán y con el fin de implementar la política de máxima presión volvió a imponer unilateralmente severas sanciones económicas a Irán, hasta el punto de cometer crímenes de guerra y asesinar brutalmente al General Qassem Soleimani, uno de los comandantes militares de alto rango de Irán y héroe de la lucha contra los grupos terroristas, incluido el ISIS.
Entre los crímenes de la administración Trump se encuentran la escalada de sanciones contra el pueblo iraní durante la pandemia del coronavirus y la privación al gobierno iraní de acceso a sus propios recursos financieros, sin poder proveerse de los medicamentos y equipos médicos necesarios para combatir el brote. El pueblo iraní sufrió mucho por las sanciones y un gran número de iraníes fueron víctimas de las políticas inhumanas de los Estados Unidos de América.
Sin embargo, con la llegada de Joe Biden y su voluntad de volver al acuerdo nuclear, se ha generado la esperanza de que se pueda revivir el acuerdo, siempre y cuando exista la buena voluntad de todas las partes. En este sentido, las conversaciones entre Irán y las otras partes del acuerdo se reanudaron nuevamente en Viena a principios de 2021.
Con la toma de posesión del nuevo presidente de Irán, el Sr. Raisi, en el verano de 2021, estas negociaciones se han acelerado, pero aún existen diferencias entre las partes para llegar a un acuerdo. En opinión de la República Islámica de Irán, para que estas negociaciones sean exitosas, se deben cumplir tres cuestiones:
- Estados Unidos debe levantar todas las sanciones impuestas a Irán luego de la retirada de Donald Trump del acuerdo nuclear.
- El gobierno de EEUU debe garantizar que ese país no volverá a quedar fuera del acuerdo.
- El establecimiento de un mecanismo de verificación para asegurarse de que las partes están cumpliendo con sus obligaciones bajo el acuerdo nuclear.
En cualquier caso, la República Islámica de Irán, con sentido de responsabilidad por la paz y la seguridad mundiales y con una seria voluntad de llegar a un acuerdo, ha entrado activa y constructivamente en estas negociaciones, cuya octava ronda se celebra actualmente en Viena, y espera que las otras partes para lograr este objetivo, tengan la voluntad y la autoridad necesarias.
Sin embargo, el gobierno de los EEUU, desde los primeros días de la victoria de la Revolución Islámica, al ver amenazados sus intereses en la sensible región de Asia Occidental, trató de crear problemas, sabotajes y crisis para la nación persa. Para llevar a cabo sus propósitos, el gobierno de Estados Unidos tomó una serie de acciones contra la República Islámica de Irán, como su respaldo a intentos separatistas, el persuadir al entonces presidente iraquí Saddam Hussein de invadir Irán e imponer una guerra de ocho años al régimen iraní recién formado, así como bloquear la propiedad iraní en ese país, apoyar golpes de estado y a grupos terroristas, así como aplicar severas sanciones económicas.
Afortunadamente, con la resistencia y la estabilidad del gobierno y el pueblo de Irán, estas medidas no han podido detener a la República Islámica de Irán en su camino de crecimiento. Hoy en día, la República Islámica de Irán, luego de 43 años, sigue con más firmeza, con más motivación y con el gran respaldo popular, su camino hacia la justicia, igualdad y progreso, manteniendo siempre el espíritu de libertad y anti-tiranía. La República Islámica de Irán, durante estos años, ha superado las dificultades, limitaciones y sanciones mediante la resistencia, sabiduría, el discernimiento de las conveniencias y la dignidad de la nación, y, apoyándose únicamente en capacidades domésticas y utilizando el potencial científico de sus jóvenes, ha alcanzado grandes logros en ámbitos políticos, económicos, científicos y tecnológicos, convirtiéndose en uno de los países más estables e importantes en el Oriente Medio e incluso en el mundo entero.
Sin duda, uno de los aspectos más trascendentes de la Revolución Islámica ha sido los cambios en ámbito de las relaciones exteriores, que han conducido en la formación de una política soberana, dinámica, innovadora, construida en base a dos firmes e intocables columnas: la no injerencia en asuntos de otros países y no permitir injerencias en asuntos internos de nuestro país.
Nuestro país, a lo largo de las últimas cuatro décadas, siempre ha tratado de dar pasos positivos para la distensión y cooperación con otros países, en aras de eliminar las preocupaciones de la Comunidad Internacional, en algunos temas como es el caso de acceso a la energía nuclear.
Indudablemente, uno de los valiosos éxitos políticos de la República Islámica de Irán ha sido el Acuerdo Nuclear con los Países cinco más uno (5+1), como resultado de doce años de negociaciones constantes entre Irán y seis (6) potencias mundiales que fue firmado el 14 de julio del 2015, conocido como el Plan Integral de Acción Conjunta.
Este acuerdo fue un gran logro y victoria histórica tanto para Irán, como para los países cinco más uno (5+1) y el mundo entero, ya que prevaleció el diálogo y la diplomacia frente a la lógica bélica y de violencia. Además, resultó en la frustración de la Irano-Fobia, emprendido por algunas potencias mundiales, demostrando al mundo la verdad del pueblo iraní. Con este acuerdo, los doce años de resistencia del pueblo iraní frente a las presiones, amenazas y sanciones, tuvo un resultado favorable y al fin las Naciones Unidas y las seis potencias del mundo reconocieron el derecho de nuestra nación a la tecnología nuclear con fines pacíficos.
Pese a ello, el expresidente de EEUU se retiró del acuerdo en 2018, revelando de esa manera al mundo la naturaleza del gobierno de los EEUU, en flagrante violación de los acuerdos internacionales.
Para destruir el acuerdo nuclear, el régimen de Trump recurrió al terrorismo económico contra Irán y con el fin de implementar la política de máxima presión volvió a imponer unilateralmente severas sanciones económicas a Irán, hasta el punto de cometer crímenes de guerra y asesinar brutalmente al General Qassem Soleimani, uno de los comandantes militares de alto rango de Irán y héroe de la lucha contra los grupos terroristas, incluido el ISIS.
Entre los crímenes de la administración Trump se encuentran la escalada de sanciones contra el pueblo iraní durante la pandemia del coronavirus y la privación al gobierno iraní de acceso a sus propios recursos financieros, sin poder proveerse de los medicamentos y equipos médicos necesarios para combatir el brote. El pueblo iraní sufrió mucho por las sanciones y un gran número de iraníes fueron víctimas de las políticas inhumanas de los Estados Unidos de América.
Sin embargo, con la llegada de Joe Biden y su voluntad de volver al acuerdo nuclear, se ha generado la esperanza de que se pueda revivir el acuerdo, siempre y cuando exista la buena voluntad de todas las partes. En este sentido, las conversaciones entre Irán y las otras partes del acuerdo se reanudaron nuevamente en Viena a principios de 2021.
Con la toma de posesión del nuevo presidente de Irán, el Sr. Raisi, en el verano de 2021, estas negociaciones se han acelerado, pero aún existen diferencias entre las partes para llegar a un acuerdo. En opinión de la República Islámica de Irán, para que estas negociaciones sean exitosas, se deben cumplir tres cuestiones:
- Estados Unidos debe levantar todas las sanciones impuestas a Irán luego de la retirada de Donald Trump del acuerdo nuclear.
- El gobierno de EEUU debe garantizar que ese país no volverá a quedar fuera del acuerdo.
- El establecimiento de un mecanismo de verificación para asegurarse de que las partes están cumpliendo con sus obligaciones bajo el acuerdo nuclear.
En cualquier caso, la República Islámica de Irán, con sentido de responsabilidad por la paz y la seguridad mundiales y con una seria voluntad de llegar a un acuerdo, ha entrado activa y constructivamente en estas negociaciones, cuya octava ronda se celebra actualmente en Viena, y espera que las otras partes para lograr este objetivo, tengan la voluntad y la autoridad necesarias.
11 de febrero de 2022
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12 de febrero de 2022