El acuerdo militar entre Rusia y Egipto cambia la situación estratégica en Oriente Medio
Al Manar 2 de diciembre de 2017
Rusia ha publicado un acuerdo entre su país y Egipto, que permitirá a sus aviones utilizar cualquier base aérea dentro del territorio egipcio y usar el espacio aéreo del país norteafricano.
Este acuerdo se produce 24 horas después de que el ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu, hiciera una visita oficial a El Cairo para reunirse con el presidente egipcio, Abdul Fatah al Sisi, y su ministro de Defensa.
Para el New York Times, la cooperación entre Rusia y Egipto, que permite a los rusos utilizar las bases y el espacio aéreo de Egipto, supone que Moscú dispondrá de la mayor presencia militar en Egipto desde 1973 cuando entre en vigor, es decir, que Rusia tendrá los mismos privilegios de los que EEUU había gozado en Egipto en las pasadas décadas. En este sentido, el periódico cita al experto en temas egipcios del Consejo de Seguridad Nacional de EEUU, que advirtió que el acuerdo era “un grave problema para las relaciones de defensa egipcio-estadounidenses”.
El periódico norteamericano cita también a medios rusos, que afirmaron que el acuerdo ayudará a Rusia en su campaña militar en Siria, un tema en el que existe una convergencia de posturas entre Sisi y su homólogo ruso, Vladimir Putin. En este sentido, Vladimir Vetin, director del Centro para Oriente Medio del Instituto de Estudios Estratégicos de Rusia, afirmó que el acceso de Rusia a los aeropuertos egipcios facilitará la misión de sus aviones en Siria, según un informe de la agencia rusa Novosti.
El Times también recuerda la fuerte relación personal entre Putin y Sisi, señalando que ellos han firmado un acuerdo por valor de 3.500 millones de dólares para la entrega de armas rusas a Egipto y apoyan al general Jalifa Haftar en Libia frente al Gobierno de Reconciliación Nacional respaldado por EEUU. El diario señala que Moscú ha establecido una presencia limitada en el desierto egipcio para apoyar a Haftar.
El portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Edgar Vasques, dijo: “Hemos tomado nota de estos informes y vigilamos la situación”.
Según el sitio de inteligencia norteamericano Stratfor, el acuerdo ruso-egipcio muestra el deseo de Moscú de incrementar su influencia en Oriente Medio por tres razones: tratar con los desafíos económicos globales en sus propios términos, contener a los grupos extremistas para impedir que se extiendan hacia su territorio o zonas próximas y acceder a nuevos mercados para sus armas, productos, petróleo y gas.
El sitio señala que el acuerdo con Egipto permitirá a Rusia expandir su influencia en Libia, el Mar Rojo, el Cuerno de África y el Mediterráneo y revela que Moscú está negociando la construcción de una base naval en Sudán.
Este acuerdo se produce 24 horas después de que el ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu, hiciera una visita oficial a El Cairo para reunirse con el presidente egipcio, Abdul Fatah al Sisi, y su ministro de Defensa.
Para el New York Times, la cooperación entre Rusia y Egipto, que permite a los rusos utilizar las bases y el espacio aéreo de Egipto, supone que Moscú dispondrá de la mayor presencia militar en Egipto desde 1973 cuando entre en vigor, es decir, que Rusia tendrá los mismos privilegios de los que EEUU había gozado en Egipto en las pasadas décadas. En este sentido, el periódico cita al experto en temas egipcios del Consejo de Seguridad Nacional de EEUU, que advirtió que el acuerdo era “un grave problema para las relaciones de defensa egipcio-estadounidenses”.
El periódico norteamericano cita también a medios rusos, que afirmaron que el acuerdo ayudará a Rusia en su campaña militar en Siria, un tema en el que existe una convergencia de posturas entre Sisi y su homólogo ruso, Vladimir Putin. En este sentido, Vladimir Vetin, director del Centro para Oriente Medio del Instituto de Estudios Estratégicos de Rusia, afirmó que el acceso de Rusia a los aeropuertos egipcios facilitará la misión de sus aviones en Siria, según un informe de la agencia rusa Novosti.
El Times también recuerda la fuerte relación personal entre Putin y Sisi, señalando que ellos han firmado un acuerdo por valor de 3.500 millones de dólares para la entrega de armas rusas a Egipto y apoyan al general Jalifa Haftar en Libia frente al Gobierno de Reconciliación Nacional respaldado por EEUU. El diario señala que Moscú ha establecido una presencia limitada en el desierto egipcio para apoyar a Haftar.
El portavoz del Departamento de Estado de EEUU, Edgar Vasques, dijo: “Hemos tomado nota de estos informes y vigilamos la situación”.
Según el sitio de inteligencia norteamericano Stratfor, el acuerdo ruso-egipcio muestra el deseo de Moscú de incrementar su influencia en Oriente Medio por tres razones: tratar con los desafíos económicos globales en sus propios términos, contener a los grupos extremistas para impedir que se extiendan hacia su territorio o zonas próximas y acceder a nuevos mercados para sus armas, productos, petróleo y gas.
El sitio señala que el acuerdo con Egipto permitirá a Rusia expandir su influencia en Libia, el Mar Rojo, el Cuerno de África y el Mediterráneo y revela que Moscú está negociando la construcción de una base naval en Sudán.