Impotente, la derecha boliviana pide intervención de EE.UU. para evitar reelección de Evo
Cuba Debate Nara Romero Rams 22 de abril de 2019
Evo Morales. Foto: David Mercado/ Reuters.
La solicitud de una intervención de Estados Unidos por parte de legisladores de la oposición para evitar la reelección del presidente, Evo Morales, en los próximos comicios generales, es calificado hoy de el segundo intento para destruir a Bolivia.
Así lo definió el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, quien recordó que 12 diputados, encabezados por Carmen Eva Gonzales y apoyados por la boliviana residente en la nación norteña Eva Sara Landau, impulsaron el golpe cívico prefectural, la política separatista entre 2006 y 2008, y la Masacre de Porvenir en Pando (2008).
Quintana precisó en entrevista con la emisora radial San Gabriel, ubicada en la ciudad de El Alto, que Landau, vicepresidenta de la consultora y organización no gubernamental Dark Horse Political, sirvió ahora de intermediaria para entregar la misiva al mandatario estadounidense, Donald Trump.
“La carta es escrita deliberadamente, además pensada deliberadamente, se supone desde Estados Unidos, la idea viene de Estados Unidos, les hacen firmar la carta, se gestiona con una consultora y detrás de esto están los mismos personajes que impulsaron el golpe cívico-prefectural y la aventura separatista en Bolivia del año 2006 al 2008”, afirmó.
Identificó además a los políticos opositores Samuel Doria Medina y Tuto Quiroga como los dirigentes de ese proyecto de ataque contra el proceso de cambio impulsado desde 2006 por Morales, y que actualmente continúan con la estrategia de tratar de destruir al país.
Recordó que Doria Medina, candidato presidencial por Unidad Nacional para los comicios previsto el 20 de octubre próximo, hizo la misma solicitud en 2006 aprovechando sus vínculos con la embajada de Washington, y en el caso de Quiroga, pidió “estrangular económicamente a Bolivia, y eso lo podemos demostrar con los cables que enviaba el entonces embajador Philip Goldberg, al departamento de Estado”.
No han dejado de conspirar –añadió- y aceptar el dinero del gobierno de Estados Unidos para desarrollar acciones políticas contra el proceso de cambio, y los calificó de “sicarios políticos” porque no defienden la patria, sus recursos naturales y la soberanía.
“Lo que están defendiendo es volver al pasado para que Bolivia no tenga soberanía, no crezca económicamente, no haya justicia social, no haya obras, no haya empleo, no haya salud, no haya educación”, detalló.
Por otra parte, el abogado constitucionalista Iván Lima declaró que la postura de los legisladores de la oposición busca generar un caos social en el país suramericano, situación favorable para la intervención estadounidense.
“Hay una petición, hay una acción y va a haber un resultado, el resultado que quieren los firmantes de esa carta es que Evo Morales no participe en las elecciones de octubre de este año, eso significa violar el artículo 203 de la Constitución, llevar al país a una situación de incertidumbre y de caos social (…), y generar una situación de convulsión que pueda habilitar la intervención del Gobierno americano”, aseguró.
A juicio de Lima, el objetivo final de esa acción es desvirtuar el voto de los bolivianos en los comicios generales.
En la misma línea opinó la diputada del Movimiento Al Socialismo (MAS), Mireya Montaño, quien aseguró que los legisladores están temerosos porque el candidato más fuerte para las elecciones es el jefe de Estado boliviano por los logros de su gestión política desde 2006.
“Hay un cierto miedo por las próximas elecciones, en octubre se nos vienen elecciones y hay un cierto miedo, tienen un delirio de persecución contra Evo Morales”, comentó Montaño.
Consideró que la estabilidad política, social y económica generadas por las políticas impulsadas por Morales son el mejor argumento para ser reelecto por el pueblo.
Instó a la oposición a mantener la tranquilidad porque -dijo- el voto popular será el que elegirá a los próximos gobernantes.
Así lo definió el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, quien recordó que 12 diputados, encabezados por Carmen Eva Gonzales y apoyados por la boliviana residente en la nación norteña Eva Sara Landau, impulsaron el golpe cívico prefectural, la política separatista entre 2006 y 2008, y la Masacre de Porvenir en Pando (2008).
Quintana precisó en entrevista con la emisora radial San Gabriel, ubicada en la ciudad de El Alto, que Landau, vicepresidenta de la consultora y organización no gubernamental Dark Horse Political, sirvió ahora de intermediaria para entregar la misiva al mandatario estadounidense, Donald Trump.
“La carta es escrita deliberadamente, además pensada deliberadamente, se supone desde Estados Unidos, la idea viene de Estados Unidos, les hacen firmar la carta, se gestiona con una consultora y detrás de esto están los mismos personajes que impulsaron el golpe cívico-prefectural y la aventura separatista en Bolivia del año 2006 al 2008”, afirmó.
Identificó además a los políticos opositores Samuel Doria Medina y Tuto Quiroga como los dirigentes de ese proyecto de ataque contra el proceso de cambio impulsado desde 2006 por Morales, y que actualmente continúan con la estrategia de tratar de destruir al país.
Recordó que Doria Medina, candidato presidencial por Unidad Nacional para los comicios previsto el 20 de octubre próximo, hizo la misma solicitud en 2006 aprovechando sus vínculos con la embajada de Washington, y en el caso de Quiroga, pidió “estrangular económicamente a Bolivia, y eso lo podemos demostrar con los cables que enviaba el entonces embajador Philip Goldberg, al departamento de Estado”.
No han dejado de conspirar –añadió- y aceptar el dinero del gobierno de Estados Unidos para desarrollar acciones políticas contra el proceso de cambio, y los calificó de “sicarios políticos” porque no defienden la patria, sus recursos naturales y la soberanía.
“Lo que están defendiendo es volver al pasado para que Bolivia no tenga soberanía, no crezca económicamente, no haya justicia social, no haya obras, no haya empleo, no haya salud, no haya educación”, detalló.
Por otra parte, el abogado constitucionalista Iván Lima declaró que la postura de los legisladores de la oposición busca generar un caos social en el país suramericano, situación favorable para la intervención estadounidense.
“Hay una petición, hay una acción y va a haber un resultado, el resultado que quieren los firmantes de esa carta es que Evo Morales no participe en las elecciones de octubre de este año, eso significa violar el artículo 203 de la Constitución, llevar al país a una situación de incertidumbre y de caos social (…), y generar una situación de convulsión que pueda habilitar la intervención del Gobierno americano”, aseguró.
A juicio de Lima, el objetivo final de esa acción es desvirtuar el voto de los bolivianos en los comicios generales.
En la misma línea opinó la diputada del Movimiento Al Socialismo (MAS), Mireya Montaño, quien aseguró que los legisladores están temerosos porque el candidato más fuerte para las elecciones es el jefe de Estado boliviano por los logros de su gestión política desde 2006.
“Hay un cierto miedo por las próximas elecciones, en octubre se nos vienen elecciones y hay un cierto miedo, tienen un delirio de persecución contra Evo Morales”, comentó Montaño.
Consideró que la estabilidad política, social y económica generadas por las políticas impulsadas por Morales son el mejor argumento para ser reelecto por el pueblo.
Instó a la oposición a mantener la tranquilidad porque -dijo- el voto popular será el que elegirá a los próximos gobernantes.