¿Amenaza nuclear o militarización de península coreana por EEUU?
Hispan TV Por Rasoul Goudarzi 4 de junio de 2017
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La Península Coreana siempre ha sido considerada como uno de los epicentros de la crisis en el mundo.
Actualmente la escalada de tensión entre Pyongyang y Washington, que ha conllevado por consiguiente los constantes lanzamientos de misiles balísticos por parte de Corea del Norte, especialmente en aguas de Japón, ha dejado a la región a punto de explotarse.
En este artículo pretendemos estudiar la raíz de la creciente tensión entre EEUU y Corea del Norte, además de analizar las consecuencias de una confrontación militar.
EEUU militariza la península coreana
Desde hace décadas, las pruebas mislísticas y el programa nuclear norcoreano han preocupado a EEUU y sus aliados como Japón y Corea del Sur. Washington dice que Pyongyang a través de cada una de las pruebas avanza más en el campo misilístico, por lo tanto, junto con sus socios en el Consejo de Seguridad de la ONU están imponiendo cada día más sanciones contra Pyongyang. Por lo tanto, actualmente, Corea del Norte se ha enfrentado con las más duras sanciones, a las que se ha unido incluso su aliado más cercano, es decir, China.
Incluso la llegada de Doanld Trump a la presidencia de EEUU, empeoró las circunstancias de tal forma que se baraja la posibilidad de una confrontación militar en la Península Coreana. Algo que se debe al cambio de la política de la Casa Blanca respecto a Corea del Norte. De hecho, antes Washington solo buscaba medidas de presión económica para frenar el programa nuclear norcoreano, sin embargo, bajo el mandato de Trump está recurriendo a la opción militar. Algo que se puede ver en el envío de las más avanzadas naves y buques de guerra a la región, junto a la celebración de una gran maniobra militar con Corea del Sur.
En el marco de la opción militar de EEUU contra Corea del Norte, el Secretario de Estado estadounidense, Rex W. Tillerson, en su viaje a Japón, Corea del Sur y China, afirmó que está por terminar la paciencia de Washington y que dos décadas de diplomacia no ha funcionado, así que si Pyongyang continúa sus actividades nucleares, Washington se ve obligado a recurrir a la opción militar.
Cabe destacar que el hecho de demostrar a Corea del Norte como una amenaza extraterritorial, ha dado la oportunidad a los estadounidenses a endurecer sus medidas y reforzar su presencia militar en la región. En este contexto, ya EEUU, pese a la oposición de China y Corea del Norte, activó su célebre escudo antimisiles, THAAD, desplegado en Corea del Sur.
Ante estas movilizaciones de EEUU tanto militar como sanciones económicas, Pyongyang realiza ya de forma frecuente las pruebas misilísticas. En una palabra, Corea del Norte considera su poderío nuclear como un instrumento disuasivo ante amenazas existentes que pesan en su contra e incluso ha anunciado que está listo para involucrarse en cualquier tipo de guerra que lance EEUU.
El país asiático ha mejorado sus misiles balísticos así que efectivamente ha ampliado su alcance. Varios 'think tanks' estadounidenses recientemente calcularon que sus armas probablemente ya son capaces de alcanzar hasta el territorio mexicano.
Militarización de la península coreana la perspectiva de tensión
No todo se limita a una confrontación entre Pyongyang y Washington. De hecho, EEUU bajo una supuesta amenaza nuclear de Pyongyang está militarizando la península coreana, donde se considera como el espacio estratégico o “Patio Trasero” de China. Razón, por la cual, Pekín consciente de lo que está pasando en la región y siguiendo los pasos que da Washington, dejó bien claro que apuesta por la plena desnuclearización de la península coreana para que no solo reduzca la presencia militar estadounidense, sino su propio territorio esté a salvo de una probable guerra nuclear.
En este contexto, el otro rival de EEUU, es decir, Rusia que se opone a tal presencia de Washington en esta parte del mundo, llamó a las partes involucradas a volver a las mesas de negociaciones y resolver el tema mediante el diálogo.
Sin embargo, el diálogo no ha funcionado para rebajar la tensión existente. De hecho, Corea del Norte no confía más en EEUU para seguir dialogando sobre su programa nuclear y esto tiene raíz en que en 1994, Washington firmó un Acuerdo Marco con Corea del Norte, que incluía el levantamiento del embargo a cambio de la suspensión de sus actividades nucleares. Corea del Norte cumplió su parte, es decir, cesó su programa atómico, pero Washington no quitó las sanciones y, a consecuencia, en 2003 fracasó el pacto.
Asimismo, en 2015 Corea del Norte estaba muy dispuesta a detener su carrera militar nuclear y quitar toda amenaza. El expresidente estadounidense Barack Obama rechazó el pacto. ¿Sabe por qué lo rechazó? Porque a cambio, EE.UU. tenía que hacer una cosa simple, dejar de hacer ejercicios militares, dejar de presumir sus armas y dejar de pasear sus naves militares frente a la frontera de Corea del Norte, algo que rechazó Obama.
En este contexto, se puede decir que si realmente EEUU busca despejar la amenaza nuclear de Corea del Norte, acogía con beneplácito las dos veces que Pyongyang aceptó voluntariamente desmantelar su programa nuclear, algo que no lo hizo. Así que el ritmo de los acontecimientos acaecidos entre ambas partes y las últimas movilizaciones militares estadounidenses en la península coreana, podrían suponer que lo que Washington busca a través del planteamiento de amenaza nuclear norcoreana, es ampliar su presencia en esta región y limitar la influencia china en esta parte del mundo. Una medida que por un solo pequeño mal cálculo, podría resultar en una catástrofe total para la región asiática. Algo que sería muy probable, en caso de que Pyongyang pretenda responder las amenazas con una bomba nuclear ya que este país no tiene nada que perder.
Actualmente la escalada de tensión entre Pyongyang y Washington, que ha conllevado por consiguiente los constantes lanzamientos de misiles balísticos por parte de Corea del Norte, especialmente en aguas de Japón, ha dejado a la región a punto de explotarse.
En este artículo pretendemos estudiar la raíz de la creciente tensión entre EEUU y Corea del Norte, además de analizar las consecuencias de una confrontación militar.
EEUU militariza la península coreana
Desde hace décadas, las pruebas mislísticas y el programa nuclear norcoreano han preocupado a EEUU y sus aliados como Japón y Corea del Sur. Washington dice que Pyongyang a través de cada una de las pruebas avanza más en el campo misilístico, por lo tanto, junto con sus socios en el Consejo de Seguridad de la ONU están imponiendo cada día más sanciones contra Pyongyang. Por lo tanto, actualmente, Corea del Norte se ha enfrentado con las más duras sanciones, a las que se ha unido incluso su aliado más cercano, es decir, China.
Incluso la llegada de Doanld Trump a la presidencia de EEUU, empeoró las circunstancias de tal forma que se baraja la posibilidad de una confrontación militar en la Península Coreana. Algo que se debe al cambio de la política de la Casa Blanca respecto a Corea del Norte. De hecho, antes Washington solo buscaba medidas de presión económica para frenar el programa nuclear norcoreano, sin embargo, bajo el mandato de Trump está recurriendo a la opción militar. Algo que se puede ver en el envío de las más avanzadas naves y buques de guerra a la región, junto a la celebración de una gran maniobra militar con Corea del Sur.
En el marco de la opción militar de EEUU contra Corea del Norte, el Secretario de Estado estadounidense, Rex W. Tillerson, en su viaje a Japón, Corea del Sur y China, afirmó que está por terminar la paciencia de Washington y que dos décadas de diplomacia no ha funcionado, así que si Pyongyang continúa sus actividades nucleares, Washington se ve obligado a recurrir a la opción militar.
Cabe destacar que el hecho de demostrar a Corea del Norte como una amenaza extraterritorial, ha dado la oportunidad a los estadounidenses a endurecer sus medidas y reforzar su presencia militar en la región. En este contexto, ya EEUU, pese a la oposición de China y Corea del Norte, activó su célebre escudo antimisiles, THAAD, desplegado en Corea del Sur.
Ante estas movilizaciones de EEUU tanto militar como sanciones económicas, Pyongyang realiza ya de forma frecuente las pruebas misilísticas. En una palabra, Corea del Norte considera su poderío nuclear como un instrumento disuasivo ante amenazas existentes que pesan en su contra e incluso ha anunciado que está listo para involucrarse en cualquier tipo de guerra que lance EEUU.
El país asiático ha mejorado sus misiles balísticos así que efectivamente ha ampliado su alcance. Varios 'think tanks' estadounidenses recientemente calcularon que sus armas probablemente ya son capaces de alcanzar hasta el territorio mexicano.
Militarización de la península coreana la perspectiva de tensión
No todo se limita a una confrontación entre Pyongyang y Washington. De hecho, EEUU bajo una supuesta amenaza nuclear de Pyongyang está militarizando la península coreana, donde se considera como el espacio estratégico o “Patio Trasero” de China. Razón, por la cual, Pekín consciente de lo que está pasando en la región y siguiendo los pasos que da Washington, dejó bien claro que apuesta por la plena desnuclearización de la península coreana para que no solo reduzca la presencia militar estadounidense, sino su propio territorio esté a salvo de una probable guerra nuclear.
En este contexto, el otro rival de EEUU, es decir, Rusia que se opone a tal presencia de Washington en esta parte del mundo, llamó a las partes involucradas a volver a las mesas de negociaciones y resolver el tema mediante el diálogo.
Sin embargo, el diálogo no ha funcionado para rebajar la tensión existente. De hecho, Corea del Norte no confía más en EEUU para seguir dialogando sobre su programa nuclear y esto tiene raíz en que en 1994, Washington firmó un Acuerdo Marco con Corea del Norte, que incluía el levantamiento del embargo a cambio de la suspensión de sus actividades nucleares. Corea del Norte cumplió su parte, es decir, cesó su programa atómico, pero Washington no quitó las sanciones y, a consecuencia, en 2003 fracasó el pacto.
Asimismo, en 2015 Corea del Norte estaba muy dispuesta a detener su carrera militar nuclear y quitar toda amenaza. El expresidente estadounidense Barack Obama rechazó el pacto. ¿Sabe por qué lo rechazó? Porque a cambio, EE.UU. tenía que hacer una cosa simple, dejar de hacer ejercicios militares, dejar de presumir sus armas y dejar de pasear sus naves militares frente a la frontera de Corea del Norte, algo que rechazó Obama.
En este contexto, se puede decir que si realmente EEUU busca despejar la amenaza nuclear de Corea del Norte, acogía con beneplácito las dos veces que Pyongyang aceptó voluntariamente desmantelar su programa nuclear, algo que no lo hizo. Así que el ritmo de los acontecimientos acaecidos entre ambas partes y las últimas movilizaciones militares estadounidenses en la península coreana, podrían suponer que lo que Washington busca a través del planteamiento de amenaza nuclear norcoreana, es ampliar su presencia en esta región y limitar la influencia china en esta parte del mundo. Una medida que por un solo pequeño mal cálculo, podría resultar en una catástrofe total para la región asiática. Algo que sería muy probable, en caso de que Pyongyang pretenda responder las amenazas con una bomba nuclear ya que este país no tiene nada que perder.